Entre laburo y desempleo...

En estas horas de poco extenuante trabajo, no puedo evitar preguntarme?: ¿Cómo mierda el ser humano puede tener la capacidad para mirar a los ojos a otro, sin expresar ni el más mínimo gesto de resentimiento ni arrepentimiento? ¿O será que el medio nos convierte lentamente en quienes finalmente nos domina, sin necesariamente ser lo que queremos?

Gente falsa, ambiente denso y cínico que me asombra de verdad! Pero aquí estoy nuevamente sumergida donde no quiero estar...

Al parecer mi camino se ve, una vez más, desviado para satisfacer necesidades de otras personas por sobre las mías. No lo siento por completo incorrecto, obvio, si mi conciencia nunca jamás descasaría en paz de no hacerlo, pero me gustaría saborear esa libertad una vez más, por más tiempo...

Nunca antes me sentí tan libre, por eso lo recuerdo con tanta nostalgia, porque aún recuerdo la plenitud que sentí.

Hoy escribo nuevas historias! No una sola, por supuesto, pues gozo de buena salud y ganas de vivir y experimentar cosillas nuevas, que me lleven a viajar por el infinito mundo de deseos y aventuras que existen por ahí, en disposición a mi y al alcance de mis deditos.

Balbuceos varios, sentada en mi escritorio, mientras espero que me entreguen la información necesaria para comenzar a hundir mi cerebrito en la mierda que nunca ha sido excavada antes por nadie de nuestro lado...